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Esta es la razón por la que Black Mirror debe morir
Black Mirror tiene que morir, por el bien de todos. Después de 6 años y 19 episodios, es momento de que está increíble serie, creada por Charlie Brooker, se vaya para siempre.
Puede sonar muy descabellado y tajante, pero en cierto punto, tenemos razón…
No es que no nos guste Black Mirror. Nos encanta desde que apareció en 2011, con la historia de un primer ministro forzado a tener relaciones sexuales con un cerdo, y sigue haciéndolo: el tenso terror de ‘Metalhead‘ y el retorcido romanticismo de ‘Hang the DJ ‘ fueron dos de los momentos más destacados de su cuarta temporada (y de paso de todas las emitidas hasta la fecha).
Su creador, Brooker, está lejos de agotarse en cuanto a su creatividad, retirarse con gracia antes de que la serie se convierta en una autoparodia no sería una mala idea. Sin embargo, el razonamiento es otro: es obvio que escribir y producir Black Mirror está ocupando la mayor parte del tiempo de Brooker. Incluso el año pasado tuvo que cancelar Wipe, admitiendo que simplemente se había «quedado sin caminos».
Si Black Mirror se marchara en lo más alto, podría significar que recuperaríamos Wipe. Pero más que eso, también le daría a Brooker más tiempo para dedicarlo a nuevos proyectos. La gran razón por la que queremos que Black Mirror termine es porque deseamos desesperadamente ver qué más nos puede ofrecer.
Sí, con esta serie Brooker ha conseguido el mayor éxito de crítica, ganando un puñado de Emmys por el capítulo de la tercera temporada ‘San Junipero‘. Pero si echamos un vistazo rápido a sus créditos anteriores como guionista, está claro que no era precisamente un novato antes de crear Black Mirror.
En 2005, él y Chris Morris co-escribieron Nathan Barley, una comedia basada en un personaje que Brooker había creado que presentaba listas de televisión falsas e indignantes. Los primeros créditos en solitario de Brooker llegaron tres años después con la serie Dead Set, una serie precursora de Black Mirror, por la manera en que fusionó sus pasiones tanto por el terror como para la sátira. Más tarde, en 2012, puso su ojo en el género cómico con A Touch of Cloth, un glorioso desmantelamiento de los clichés sobre policías.
Nos encanta Black Mirror, pero tras cuatro temporadas, tenemos verdadera curiosidad por saber qué más tiene Brooker en el tintero. ¿Cuál será su próxima idea?
Tampoco hay ninguna razón por la cual Brooker deba limitarse a la televisión. ¿Cómo podría ser su primera película? Y, por supuesto, no encantaría leer su primera novela…
Black Mirror ha sido una obra fantástica. Pero ahora es momento de explorar nuevos horizontes. Porque, aunque en el futuro que nos deja ver en la serie es bastante obscuro, esperemos que este no sea el futuro de su carrera.